¡¡SE ACABARON LOS EXÁMENES!!
La vida es un carnaval...

Eeeeeepa! Se acabó el estudiar hasta junio!! (aunque si somos completamente sinceros, tampoco hemos estudiado en febrero...)
Ahora os voy a relatar cómo fue mi primer fin de semana "tranquilo" (cuando digo "tranquilo" me refiero a sin tener una voz de la conciencia que me dijera que salir está muy mal y que debería estar estudiando)

Viernes: salimos del exámen de Teoría y Práctica de la Traducción y automáticamente empezamos a hacer cuentas para ver cómo nos viene el exámen de septiembre...:-S
Vamos a la cafetería a desahogarnos un poco sobre los profesores "es q me tiene manía" "es q yo podría haber aprobado este exámen perfectamente y CON NOTA" (no tenemos vergüenza) "es que justo me ha preguntado lo único que no me había estudiado"...en fin, todas esas típicas excusas de estudiante con las que seguro que ya estáis todos familiarizados. En algún momento entre los cafés y el cigarro, alguien propone ir a tajarse el pueblo y las demás, que llevamos un rato pensando en lo mismo pero nos da vergüenza proponer una borrachera a las 12 de la mañana, secundamos la moción entusiasmadas. Por el camino, nos entretenemos jugando por la calle con pelotitas de golf y de tenis, corriendo, gritando y haciendo de las nuestras.
Cuando llegamos al pueblo, ordenamos dos jarras de sangría para las "nuevas 3 Marías" y comenzamos a ponernos contentillas y a fichar tíos. Viki, en un intento de que el camarero la haga caso, tira un vaso de sangría por toda la mesa y se indigna cuando el camarero limpia la mesa sin mirar los ojitos de cordera que le está poniendo. Davinia, decide que el tio de la mesa de al lado no está mal y se acerca a pedirle fuego mientras una vocecilla oportuna le grita: <<¡Pero Davinia!¿Qué haces pidiéndole fuego a esos chicos si tú tienes mechero?>> (para que quede claro, la vocecilla que ha hablado agita el mechero en el aire mientras dice estas palabras que a Davinia le sientan peor que el tortazo que se metió delante de su chico en uno de sus primeros encuentros)
Bueno, tras mucho jijiji, y algún jojojo, y los hielos que Davinia me metió por el jersey y la sangría que amablemente me escupió también al jersey, decidimos que era un buen momento para irse a casa a dormir la siesta.

Viernes noche: Davi, Viki y yo quedamos en casa del bebé-canario para cenar y por supuesto beber mientras veíamos los carnavales en vivo y en directo. Decidimos ir al Cherokee y Davinia escribió a su "amiguito especial" diciéndole que ahí es donde pensábamos ir, para su información. Este chico especial le respondió que él estaba en el Fotoplay, y Davinia toda decidida nos dijo <<¡Rumbo a Fotoplay!>> y empezó a preguntar a todo kiski por la calle dónde estaba el bar "Fotoplay", solo para descubir que el fotoplay es la maquinita esa de juegos que hay dentro del Cherokee (si es que esta chica, cuando no se cae, empieza a preguntar falsas direcciones...la cosa es hacer el ridículo). Por fin encontramos a Mario y a sus amigos, y nos fuimos justo a tiempo hacia Jácara, cuando Viki ya le estaba enseñandole al puerta por octava vez su condón con sabor a uva y al puerta ya le estaban entrando ganillas de probarlo...(yo, toda inocente, pensaba que le estaba enseñando una piruleta...:-S)
Ya en Jácara, Viki siguió haciendo de las suyas, haciéndose pasar por danesa y con la típica "borrachera solitaria", perdiéndose por ahí y siendo víctima de sucesos extraños como borrachos cayendo del cielo (al final conseguí enterarme de la historia y resulta que dos borrachos se le habían caido encima desde la plataforma y habían quedado inconscientes en el suelo)
Cuando nos echaron, nos quedamos todos un rato en la puerta matando el tiempo, haciendo las pequeñas cosas de la vida como "echar a pies" hacia qué lado de la calle debíamos ir para coger un taxi y Davinia y yo, en nuestra línea, lanzándo alguna que otra bordería oportuna a los chicos...que por cierto, parecían salidos de la granja Piny-Pon con esos nombres que tenían de "borrego", "cordero", "palomo"...en fin.
Al final las chicas optamos por ir calle abajo, que es lo más fácil y cómodo sobretodo si llevamos tacones y los de Viki eran de Drag-Queen de los carnavales...y bueno, tras un nuevo incidente entre cubos de basura protagonizado por Viki (¡cómo no!), nos fuimos a mimir.

Sábado: ¡¡Fui a Kapital por primera vez!! La verdad es que el sitio estaba guay-del-paraguay. Adriana y yo estuvimos bailando y deshaciéndonos de gente pesada, mientras Lola y Dani se achuchaban y se picaban con tonterías de que si "la camarera está buena" que si "el del ropero me ha mirado"...en fin, son una pareja extraña. En público se ponen a hablar de exnovios y de gente que está buena, y luego en privado se cierran bajo siete cerrojos, se esconden y luego aparecen como si vinieran de la calle...vamos, es toda una parodia que la verdad me divierte bastante.
El mejor momento de la noche fue una entretenida conversación sobre "el rulo", "el escabeche", "el chorizo" y "el lomo" (al final, estos dos últimos no resultaron ser personas, sino comida de verdad). También fue un buen momento cuando Lola afirmó que le gustaba el pelo corto, negro y rizado (estaba describiendo el pelo de su novio, pero la verdad es que todos nos quedamos un poco pálidos)
El peor momento fue cuando abrieron el techo!! hacía el frio de Siberia y por unos instantes me pareció estar en el Titanic: el tono de voz de pronto se elevó muchísimo, la gente estaba pálida corriendo a ponerse abrigos y chalecos salvavidas y todos nos preguntábamos si moriríamos esa misma noche de congelación, y si luego con nuestros cuerpos harían lo mismo que con el de Walt Disney y despertaríamos en el futuro (bueno, todo esto solo lo pensé yo, pero es que la copa subía bastante).
El momento raro de la noche fue cuando nos tropezamos con el "grupo de los desheredados" (jajaja) a mi el negrito me hizo mucha gracia, porque llevaba gorro de fiesta y matasuegras y de todo, pero el pobre estaba con cara de circunstancias totalmente serio ¡pobre hombre!, y luego el "Sheriff de Robin Hood" estuvo ahí provocando dándonos barrigazos a todos...y el puerta calvo enorme que tenía las tipicas 3 rayitas de debajo de la nuca poniéndose de un farruco que daba miedo...vamos, que sin darnos cuenta, de pronto nos encontramos metidos en una movida extraña...¡qué locura! y Lola que se debía de creer Pocahontas interponiendose delante de John Smith para que a John Smith no le dieran el hachazo indio...y yo tipo abuela-sauce pensando: <<¡cómo toquen a Pocahontas me los cargo!>> y gritando como un histérica: ¡NO QUEREMOS BRONCAAAA! jaja que cualquiera lo diría por mi tonillo de voz y mis ademanes que nadie apreció por ser del tamaño de un polly-pocket :-(


Bueno, ese fue mi fin de semana, pero ahí no acaba todo: pienso seguir celebrando el final de los exámenes hasta que ocurra cualquier otro acontecimiento que me proporcione otra excusa para tajarme sin complejos ni culpa, como mi cumpleaños, o la llegada de la primavera, o que la tierra sigue siendo redonda...como sabiamente dice la canción: cualquier excusa, una chorrada es buena para brindar...
y como diría el chino del anuncio: BE WHISKY, MY FRIEND ;)

...y sigo haciendo progresos con la guitarra, y además tengo un nuevo objetivo musical: aprender a tocar pero perfectamente y que suene igual, una cancioncilla que descubrí hace poco. Es una canción poco conocida pero que a mí me parece que es mmmuy buena: "Living Life" de Kathy McCarty. Al final esas tontas canciones que nadie más conoce son las más especiales...

Temer al amor es temer a la vida, y los que temen a la vida ya están medio muertos--Bertrand Russell--